Nvidia, la compañía de chips más valiosa del mundo, navega por un complejo escenario global marcado por acuerdos comerciales estancados y crecientes tensiones con China. A pesar de los desafíos, la empresa reporta un desempeño financiero récord, impulsado por la insaciable demanda de inteligencia artificial, aunque su alta valoración en el mercado de valores comienza a generar cautela entre los inversionistas.
Acuerdos en Vilo y Restricciones Ponen a Prueba a Nvidia
Un ambicioso acuerdo que Nvidia creía tener cerrado esta primavera con los Emiratos Árabes Unidos (EAU) se ha topado con un obstáculo significativo. El plan consistía en suministrar cientos de miles de sus codiciados chips de IA a cambio de una fuerte inversión emiratí en Estados Unidos. Sin embargo, cinco meses después, la operación está paralizada. Según el Wall Street Journal, el dinero no ha llegado y los chips no se han enviado.
La demora se debe a la postura de Washington. El secretario de Comercio, Howard Lutnick, ha condicionado la concesión de licencias de exportación a que los EAU pongan el dinero sobre la mesa primero. Detrás de esta exigencia hay preocupaciones de seguridad nacional, dadas las estrechas relaciones de los EAU con China. Esta situación ha generado frustración tanto en el CEO de Nvidia, Jensen Huang, quien ha basado el crecimiento de la compañía en la demanda global, como en algunos funcionarios de la Casa Blanca que esperaban presentar el acuerdo como un símbolo del liderazgo tecnológico estadounidense.
Paralelamente, las tensiones con China continúan escalando. Durante una visita a Londres, Huang manifestó su decepción por las estrictas restricciones que enfrenta para vender sus chips más avanzados en el mercado chino. Esta semana, la situación se complicó aún más cuando los reguladores de Beijing acusaron a la empresa de prácticas monopólicas relacionadas con la adquisición de una tecnológica israelí en 2020. Además, según reportes del Financial Times, el regulador de internet de China prohibió a las empresas tecnológicas locales comprar un modelo de chip que Nvidia había diseñado específicamente para ese mercado.
“Estoy decepcionado con lo que veo, pero ellos tienen agendas más grandes que resolver entre China y Estados Unidos, y lo entiendo, somos pacientes”, declaró Huang, quien planeaba discutir estos asuntos con el presidente Donald Trump durante una cena de estado en Londres.
El Auge de la IA Impulsa Finanzas Récord
A pesar de estos vientos en contra, el desempeño financiero de Nvidia es extraordinario. En lo que va del año, sus acciones (NVDA) se han disparado un 40.5%, superando con creces el crecimiento del sector tecnológico (23.6%) y a competidores directos como Qualcomm, Texas Instruments y Marvell Technology.
El motor de este crecimiento es su división de Centros de Datos. En el segundo trimestre fiscal de 2026, este segmento generó ingresos por $41.1 mil millones de dólares, lo que representa casi el 88% de las ventas totales de la compañía. Esta cifra supone un asombroso aumento del 56% interanual. El éxito se atribuye principalmente a la alta demanda de sus plataformas de GPU Blackwell, esenciales para el entrenamiento de grandes modelos de lenguaje y aplicaciones de IA generativa.
La sólida posición financiera de la empresa se refleja en su flujo de caja libre, que alcanzó los $13.45 mil millones de dólares en el segundo trimestre, y en sus reservas de efectivo, que ascienden a $56.79 mil millones. Esta liquidez permite a Nvidia no solo reinvertir en investigación y desarrollo, sino también recompensar a sus accionistas, a quienes ha devuelto más de $24 mil millones de dólares en el primer semestre fiscal a través de dividendos y recompra de acciones.
Una Valoración Elevada que Genera Cautela
El impresionante rendimiento de Nvidia ha llevado su valoración bursátil a niveles que algunos analistas consideran excesivos. Con un “Value Score” de D, la acción cotiza a 33.62 veces sus ganancias proyectadas a 12 meses (relación P/E), una cifra superior al promedio del sector (29.07x) y a la de sus principales competidores. Por ejemplo, Qualcomm cotiza a un múltiplo de 14.2x, mientras que Texas Instruments lo hace a 29.28x.
Aunque los fundamentos de la empresa, su posición dominante en el mercado de la IA y sus perspectivas de crecimiento son sólidos, esta prima en su valoración sugiere que los inversionistas deben ser cautelosos. Por ahora, la recomendación general es mantener las acciones, confiando en que el impulso operativo y financiero de la compañía justifica su precio actual.
Mirando Hacia el Futuro: Más Allá de la IA
Mientras Nvidia consolida su dominio en la inteligencia artificial, una nueva revolución tecnológica asoma en el horizonte: la computación cuántica. Considerada por muchos como un avance potencialmente más transformador que la propia IA, esta tecnología ya está siendo integrada por gigantes como Microsoft, Google, Amazon y Meta. Expertos que en su momento identificaron el enorme potencial de Nvidia en 2016 ahora señalan que la computación cuántica representa “la próxima gran oportunidad”, abriendo un nuevo frente de innovación y una rara oportunidad para que los inversionistas se posicionen a la vanguardia del futuro tecnológico.